Tarta de frutas

DÍA 17

21 de enero


Grado de dificultad: Media

Porciones: 8  

Al preparar este postre tomé riesgos -al menos en la cocina-. Muy pocas veces me aventuro a cocinarlos por dos razones: no soy diestra en la materia y ¡son mi debilidad! Si así no le gano la batalla a los kilos, cocinando postres menos, pero esta vez decidí probar, y saben qué, pasé la prueba. Además, pese a la harina y la crema pastelera, la tarta tiene frutas y eso la salva, jeje, bueno, eso me digo para justificarme. 

La receta es relativamente sencilla, y si se animan a hacerla, se enamorarán de este postre como lo he hecho yo. 

Empezaremos con la crema pastelera. Una receta básica de la repostería, que igual sirve para relleno de empanadas, pasteles, tartas, o simplemente comerla sola, es divina. Hacerla es muy sencillo, y la técnica que les pasaré es en frío:

Ingredientes para la crema pastelera:

• 560 ml de leche
• 120 gms de azúcar
• 50 gms de fécula de maíz
• 2 huevos
• 1 vaina de vainilla o 3 cdas de esencia de vainilla (Puede ser el sabor que ustedes prefieran como café, chocolate, limón, azafrán, etc.)

Preparación:

En una cazuela se incorporan todos los ingredientes en frío y con un globo se mezclan. En llama media se cocina, siempre moviendo, hasta que adquiera una consistencia cremosa. Se deja enfriar.

Ingredientes para la tarta de frutas:

• Frutas de temporada como uvas, fresas, kiwis, moras, etc.

Para la masa:

• 500 gms de harina
• 250 gms de azúcar
• 250 gms de mantequilla a punto de pomada (suave)
• 2 huevos

Preparación:

Todos los ingredientes se mezclan en el procesador de alimentos o con la batidora. Se amasa con las manos unos minutos y se refrigera de 30 minutos a una hora. Ya fría se estira con el rodillo y se acomoda en un molde. Se presionan los bordes para que quede pareja y se quita el sobrante. Se mete al horno de 0 a 12 minutos a 180°C o 360°F. Se deja enfriar.

Con la ayuda de una manga de repostería o duya, se vacía la crema pastelera en nuestra base, y con una espátula se empareja la superficie. 

Para decorar empezamos con la fruta más pequeña como uvas o moras, que acomodaremos por toda la orilla para que nos sirva de guía. Después fresas, kiwis o la fruta que más les guste. La tarta es una buena oportunidad para echar a volar la imaginación en la decoración. El resultado es exquisito y en verdad disfrutarán compartirla con las personas que aman. Espero que les quede muy rica. 


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